AdolescenciaInfancia

Las aulas mudas / la sexualidad en la escuela

By 11 junio, 2013octubre 17th, 20196 Comments

muneca-mami-koala partoEn mis talleres y charlas con personas de todas las edades y realidades sociales se repite invariablemente una constante: el desconocimiento de la anatomía y fisiología de nuestro aparato sexual. La mayoría de los y las participantes (incluso los que acaban de trabajarlo en clase) confiesan haberlo estudiado en la escuela y haberlo olvidado, recuerdan vagamente los nombres pero en general no acaban de saber dónde se ubican ni cuál es su función.

Constato que la mayoría no conocemos ni sentimos nuestros órganos sexuales (sobre todo los internos) y esta desconexión de la zona genital nos hace más vulnerables a los abusos sexuales, a las infecciones de transmisión sexual, tanto a los embarazos no deseados como a las dificultades para concebir y a los problemas en el embarazo, parto y lactancia.

La causa de tanta desinformación se encuentra en la educación recibida tanto en casa como en la escuela, que reduce la educación sexual explícita a unas pocas conversaciones unilaterales o a un par de lecciones de ciencias naturales durante toda la educación escolar. La sexualidad es inherente a la vida pero durante la infancia los adultos hacemos como si no existiera. Así que, es imposible que con algunas clases comprendan e interioricen lo que ha sido invisible durante toda su vida.

Sin embargo, aunque no nos demos cuenta, familias y docentes hemos dicho mucho más de lo que pensamos: hemos estado educando la sexualidad de nuestros pequeños desde siempre a través de nuestro modelo, de nuestro acompañamiento de sus conductas sexuales, de lo que hemos dicho y lo que hemos callado…Sobretodo con lo que seguimos callando, obviando y desaprobando.

Para hacer un buen acompañamiento de la sexualidad de los niños y niñas en la escuela hace falta:

  1. La inclusión de la educación sexual en los programas curriculares y la voluntad de las distintas instituciones de no obviar esta dimensión del ser humano en la escuela.
  2. Un ambiente rico en estímulos que permita a los y las alumnas experimentar, realizar hipótesis y preguntas por ellos mismos e integrar esa información, y así conocer bien su aparato sexual. Actualmente las aulas suelen ser muy pobres a este nivel (imagina por unos instantes que incorporáramos la muñeca de la foto entre los juguetes de la clase, que los muñecos tuvieran los genitales representados en vez de zonas planas o que tuviéramos libros sobre sexualidad en la biblioteca de la clase).
  3. Un equipo docente que esté formado en materia de sexualidad y sepa cómo acompañar las conductas sexuales que manifiestan los y las alumnas. Se trata de una formación que no sólo implica un estudio teórico sobre las fases evolutivas del desarrollo sexual humano sino también una revisión de la propia biografía sexual y de los valores en los que fuimos educados.
  4. Trabajar con las familias para que puedan entender la línea educativa del centro y hacer un buen acompañamiento desde casa.

La educación sexual de calidad es imprescindible para un desarrollo saludable del ser humano. Debemos incorporar esta dimensión en los programas curriculares, adaptar los materiales del aula y formar a los docentes y las familias para que las nuevas generaciones crezcan entablando una buena relación con su cuerpo y su sexualidad.

Adaptación del artículo publicado en la revista Traç, junio del 2013

6 Comments

Aquesta web utilitza cookies perquè tingueu una millor experiència d'usuari. Si continueu navegant està donant el seu consentiment per a l'acceptació de la nostra política de cookies.

ACEPTAR
Aviso de cookies