Esta entrada va dedicada a todas aquellas que tenemos ciclos menstruales muy cortos (de menos de 23 días) y más de una vez hemos pensado que estamos como una cabra.
Lo voy a explicar muy gráficamente: imagínate que cada año, en vez de gozar de los cambios progresivos de una estación a otra, saltáramos directamente del mes de marzo al mes de junio, sin primavera, que pasáramos de la nieve a la playa en un abrir y cerrar de ojos, de los días cortos y pausados, al frenesí estival.
Pues esto es lo que nos ocurre a las mujeres que tenemos ciclos muy cortos: la fase preovulatoria se fusiona con la menstruación, y la sensación es de que se pasa casi directamente de la Bruja a la Madre, es decir, de la fase menstrual a la ovulatoria (una mujer con un ciclo de 21 días estaría ovulando el día 7 aproximadamente), de los días de máximo recogimiento a los de total apertura.
De este modo, el cambio es drástico. Podemos pasar de desear estar solas, tranquilas y encerradas en nuestro hogar a dejarnos llevar por un fuerte impulso de salir, seducir y estar con mucha gente. Otras veces pasamos de sentir que la vida es agotadora y difícil a pensar que nos vamos a comer el mundo y que podemos con todo.
No es que nuestras emociones sean más intensas que las de los demás, simplemente nuestro ciclo es más rápido y contrastado, por lo que los cambios se hacen más evidentes. Si conoces bien las características de tu ciclo (te recomiendo que hagas un diario del ciclo como el que se propone en Viaje al Ciclo Menstrual) podrás contextualizar los cambios y organizarte en función del mismo.
Profundizando un poquito más:
La explicación anterior es una imagen simplificada para entender la sensación que tenemos muchas de nosotras, pero en realidad sí existe una fase preovulatoria (Arquera), que está camuflada con la sangre menstrual y es muy corta.
Reconocerla (a partir del tercer o cuarto día de regla) puede ayudarte a tomar consciencia de la veloz apertura y a que el cambio de polo no sea tan abrupto.
Gracias por este post Anna, hace que me sienta menos loca! 🙂
jeje! Qué bien! Gracias a ti por compartir lo que nos pasa a muchas!